Hace tiempo me encontré con la web de Jesús Jarque García, una persona con un curriculum impresionante. Lo cite como fuente impresncindible y como maestro en una de las entradas del blog cuando era en catalá: " Teràpies: Psicomotricitat " (tengo un traductor al lado), para comprender cuanto importa una buena terápia para desarrollar la motricidad fina y gruesa en el pequeño. Este profesor sigue con su trabajo para que los niños puedan superar los obstáculos y los mayores que forman parte de su entorno como por ejemplo el educativo y el terapéutico tengan respuestas a las dudas que puedan surgir.
En el blog de mi amiga Cristina (que acaba de ganar un premio por la gran labor de divulgación sobre el autismo y que se llama " La Princesas de las Alas Rosas") y en el blog de mi amigo Jesús ("Instantes que se cruzan en el tiempo") vi unas entradas en las que daban pautas para los enseñantes y terapéutas de los niños con necesidades especiales; habían obtnido el artículo de la web: Familia y Cole cuya fuente y autor era a su vez la web de Jesús Jarque Gacía, y me alegro mucho aunque las pautas que ahora pongo no me sorprendieron puesto que están llenas de la manera de ser de este profesor.
Seguidamente pongo las pautas, copiadas tal cual de la web de familia y cole y los links :
Muchos profesores estáis tomando contacto con vuestro grupo clase y es muy probable que entre vuestros alumnos haya alguno que presente necesidades educativas especiales. No debería terminar el mes de septiembre sin tener localizados a estos alumnos y seguir los pasos mínimos que ahora les propongo:
1º. Identificar al alumnado.
Lo primero es conocer qué alumnos tienen necesidades educativas especiales en los grupos a los que va a dar clase. Para esto tiene varias fuentes de información: puede consultar al orientador que atiende a su centro, a la jefatura de estudios o a los tutores de los grupos. Esos profesionales tienen la obligación de tener localizados a ese alumnado.
2º. Lea los informes de evaluación psicopedagógica.
Todos los alumnos con necesidades especiales tienen un informe de evaluación psicopedagógica donde se explican sus necesidades y se ofrecen algunas pautas de intervención. Es obligación de los profesores tener conocimiento de esa información.
3º. Solicite asesoramiento al orientador u orientadora.
Es posible que algunos aspectos más técnicos del informe o de las necesidades del alumno le cueste comprenderlas. En cualquier caso, hable con el orientador y pida asesoramiento sobre cómo actuar con esos alumnos.
4º. Hable con el tutor, tutora o profesores del año anterior.
El tutor y los profesores del curso anterior son una buena fuente de información de cómo es el alumno y de cómo orientar mejor la intervención con él.
5º. Infórmese y fórmese si el alumno padece un trastorno.
Muchas necesidades especiales están asociadas a algún tipo de trastorno. Somos profesionales y estamos obligados a tener conocimientos a la altura de nuestra profesionalidad. En la mayoría de los trastornos habituales en la escuela, existen guías editadas para educadores: hay que leerlas. En otros casos las necesidades están asociadas a condiciones de sobredotación intelectual. También existen guías y bliografía sobre el tema.
6º. Entrevista a la familia.
Las familias de niños con necesidades educativas especiales tienen una preocupación añadida al resto de padres: si su hijo será atendido adecuadamente y si los profesores estarán a la altura. Cuanto antes entrevístese con ellos, muestre interés por su hijo, pregúnteles por sus necesidades y por cómo puede ayudarles desde el aula.